Documental de Alicia Calderón
Alicia Calderón, periodista tapatía
desde hace 14 años, presenta su primer largometraje, el documental “Retratos de
una búsqueda”. Basado en las experiencias de la periodista durante “La caravana
por la paz” del año 2011, en donde cientos de mexicanos recorrieron parte del
territorio mexicano, en la que exigían al gobierno, en ese entonces de Felipe
Calderón, diera respuesta o el paradero de miles de personas desaparecidas
desde que declaró la famosa “Guerra contra el narco”.
“Retratos de una búsqueda” se estrenó
en al año 2014 en el Festival Internacional de Cine de Morelia, ha visitado
algunas ciudades de la mano de Ambulante y el Festival Gran Fiesta de Cine
Mexicano en Guadalajara lo trajo a nuestra ciudad.
La periodista cuenta la historia de Natividad
Guerrero, mamá de Dalia Guadalupe Cruz Guerrero. Guadalupe Aguilar, mamá de
José Luis Arana Aguilar y Margarita López, mamá de Yahaira Guadalupe López
Bahena. Las vidas de estas tres mujeres se entrelazan en el vía crucis que están
viviendo desde que sus hijos desaparecieron.
Lo mejor del documental es el ángulo
por el que fue tomado, no se trata de la vida de cada desaparecido, no se trata
de saber si estaba o no involucrado con el crimen organizado. Se trata del
doliente peregrinar de sus padres buscándolos. Se trata de dar un rostro al dolor, se trata de sensibilizar a una
sociedad apática que está acostumbrada a ignorar el dolor ajeno.
Margarita, Naty y Lupita han recorrido
el país buscando a sus hijos, cruzaron la frontera para pedir ayuda al congreso
de Estados Unidos. Son rostros conocidos en las instalaciones del SEMEFO y en
las afueras de los edificios públicos. Margarita López participó en una huelga
de hambre frente a la Secretaría de Gobernación en el año 2012. Con la huelga
pedía los resultados de las pruebas de ADN que se le hicieron al cadáver sin
cabeza que las autoridades le entregaron asegurando que era su hija. Yahaira estaba casada
con un subteniente de las Fuerzas Especiales del Ejército mexicano, un comando armado la sacó de su casa y no volvieron a saber de ella. El FBI hizo
las pruebas de ADN al cadáver, los resultados no fueron entregados.
Naty ha cambiado de residencia tres
veces desde hace 5 años que busca a su hija y a su esposo, quienes
desaparecieron juntos dejando al cuidado de Naty a su pequeño hijo. Ahora vive
en Guadalajara, y estuvo presente en la proyección del documental. Platicando
con la señora Natividad escucho de sus labios no sólo su historia en este largo
peregrinar. Ella habla de su depresión y del deterioro de su salud física y
emocional durante este tiempo. Habla de su frustración y de lo difícil que le
resulta aferrarse a cuidar a su nieto.
“Le echaremos la mano” dijo Felipe
Calderón a Lupita cuando le pidió ayuda personalmente al entonces presidente
para localizar a su hijo en septiembre del 2011. En septiembre del 2015, su
hijo sigue desaparecido.
Los desaparecidos en México se cuentan
por miles, lo que equivale a miles de familias desintegradas, a miles de madres
que no encuentran la paz porque no saben si sus hijos viven o mueren, y si han
muerto, no saben en dónde está su cadáver.
Los desaparecidos son tantos que en
cualquier momento podemos coincidir en
la calle con alguno de sus familiares; tal como fue mi caso al estar viendo
este documental. La señora que estaba sentada a mi lado en la sala de cine sin
saber exactamente qué clase de película iba a ver desbordó en llanto al llegar
al final. “Yo venía al cine para distraerme, nunca pensé que iba a ver algo así”,
me dijo a manera de justificación. Su
marido estuvo desaparecido por varios días antes de que encontraran su cadáver,
muchos años después se entera que la historia que le contaron las autoridades
no era cierta. La vida de su marido fue sesgada por los que se supone que
debían estar ahí para cuidarlo, dejándola a ella con cuatro pequeños de entre
seis años y siete meses de edad.
La intención del documental, según la
misma Alicia Calderón, es fortalecer la lucha de los familiares de los miles de
desaparecidos. Más allá de las acciones del gobierno o de cualquier político,
la participación ciudadana cada vez toma más fuerza. Es muy importante
solidarizarse con las víctimas, manifestarse y denunciar. Si usted tiene un
familiar desaparecido, no lo dude, ¡Denuncie!
No hay comentarios:
Publicar un comentario